Cuando el cuerpo quiere moverse, pero la mente se siente bloqueada

Últimamente me siento bloqueada, como si por dentro algo frenara mis ganas de crear, de bailar, de avanzar. Y, sin embargo, mi círculo me recuerda cada día que no estoy parada, que Loredana’s Studio ha crecido mucho más de lo que yo misma percibo.

Hace casi un año decidí ir más allá, no limitarme solo a dar clases, sino construir un espacio artístico propio donde el baile, la expresión y el crecimiento emocional se encontraran. Empecé a moverme en escenarios nuevos, a enseñar en más sitios, a compartir desde el cuerpo y desde el alma. Y aunque a veces la energía se tambalea, sé que estoy en el camino correcto.

Soy una persona ambiciosa, y eso a veces me juega en contra. Quiero sacar lo mejor de mí ya, sentir que todo fluye sin pausas… pero olvidaba que el proceso es parte del arte. Aun en los días donde siento que me falta chispa, el movimiento sigue dentro. A veces más lento, más suave… pero sigue.

No sé qué pasará en unos meses, pero si me conozco bien, probablemente estaré viajando por Europa, aprendiendo de otras escuelas, mezclando estilos, y compartiendo desde lo que soy: una mujer que baila desde las entrañas y enseña desde el corazón.

En mis clases de baile urbano y afrofusion, intento ofrecer lo mejor de mí: energía, libertad, fuerza y conexión. Pero esto no tiene sentido sin las personas que lo reciben con el mismo amor. El público consciente y entregado es lo que hace que todo esto cobre sentido. No solo enseñamos pasos… intercambiamos energía, historia y emociones.

Gracias a quienes bailan conmigo, me animan y me inspiran a seguir. Gracias por confiar, por moverse, por estar. Sin vosotrxs, Loredana’s Studio no existiría.